sábado, 1 de enero de 2011

LA VIDA DEL HISTORIADOR MAYOR JORGE DENEGRE VAUGHTPEÑA

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UNA BIOGRAFÍA DEL POLÍGRAFO JORGE DENEGRE VAUGHT PEÑA AL ESTUILO LIVINGSTONIANO


CARMEN SIGNIFICA CANTO. LA HISTORIA DEL CARMEN EN UN TRIS:


Porque Carmen en latín culto significa cántico, poema. Recibiría este nombre porque fue un dieciséis de julio, día de la virgen del Monte Carmelo, de 1717, en que derrotaron en forma definitiva y absoluta a los últimos piratas, y los heroicos pobladores, agradecidos por el milagro, quisieron cambiar el triste nombre de Tris por el romántico de su Señora, más propicio para festivales de la palabra, en prosa o en verso.

Pero consumada la expulsión de los piratas, tomó el nombre del virrey que había designado Primer Gobernador de la Isla, a principios del siglo XVIII, al dos veces vencedor de los piratas, Don Alonso Felipe de Andrade, valeroso representante de Valero, por lo que tras la hazaña de julio de 1717, Isla Valero dependió directamente de la capital. Un siglo más tarde, Iturbide ordenó que perteneciera a Puebla. Después fue de Tabasco, Yucatán y Campeche. Y hasta el 2 de octubre de 1828 fue designada con el ansiado título del Carmen.

Entonces recibió el escudo que ostenta el lema: "El Carmen por Yucatán y ambos por la República", estampado en piedra en el frontispicio del antiguo palacio municipal. No obstante, la villa se incendió en 1850 y todo el caserío fue arrasado.

Tres años después, sobre las ruinas del villorrio, Don Tomás Marín, marino, ingeniero y general trazó la ciudad, recibiendo ese título del Presidente Comonfort, en 1856. Allí comienza, apenas, la historia de Ciudad del Carmen.

Un siglo más tarde, en esos antiguos Juegos Florales Nacionales, escuché una apacible noche de 16 de julio:

"¡Isla a proa..marinos!,/ vocifera Alaminos a su grey de Ultramar..En sus papeles de marear,/ no hay signos, ni señala su brújula designios/..te proclama Señora / con el nombre de Tris".



LA TRISTE ISLA

Sí, el poeta campeón de aquellos Juegos, consigna el hecho histórico de que fue Antón de Alaminos, Piloto Mayor, que había navegado con Colón, quien llamó al lugar "Isla Triste" porque la encontró en abandono y sin pobladores, en mayo de 1518. Había bautizado al estrecho que supuso era el límite de la tierra descubierta, Boca de Términos (entre las islas de Aguada y del Carmen). El nombre figuró en mapas y cartas geográficas con la abreviatura "Trs", contracción de Términos o de Triste.

(1.-)Tristísimo apócope transformado en "iris" que me conduce como un iridiscente hilo conductor a la causa por la que hayas publicado la Crónica de Yucatán de López Cogolludo.(2.-)

En efecto, en la obra del Padre Diego López de Cogolludo se consigna el dato, ampliamente difundido de cómo la expedición de Juan Grijalva que piloteaba Antón de Alaminos, fue la que descubrió y reconoció la Laguna de Términos y desembarcó en la Isla del Carmen, tras la segunda derrota que sufrieron ante los bravos indios de Champotón que los expulsaron de sus playas, en 1518. Estas son las palabras del cronista:




LA CRÓNICA DE YUCATÁN

"Como la instrucción era que pasasen adelante, salieron del puerto Potonchan (y advierto que es el que se llama Champotón, y así lo nombraré de aquí en adelante): prosiguiendo al Occidente, llegaron a la laguna que se llama de Términos, cuya salida a la mar parece como boca de río, que por tal la juzgaron. Decía el piloto Alaminos que aquella boca partía términos con la tierra de Yucatán, que era isla, y por eso le pusieron aquel nombre, que hoy permanece en las cartas de mareaje. Allí salió a tierra el general Juan de Grijalva con los otros capitanes y muchos soldados, y estuvieron tres días, y recorriendo todo aquel paraje hallaron que Yucatán no era isla, sino tierra firme, con la que adelante se ve al Occidente. Reconocieron también ser buen puerto (y a no pocos ha dado la vida recogerse a él, navegando esta travesía de la Nueva España) y hallaron otros adoratorios con ídolos de palo y barro, casas de cal y canto, como las otras que había visto. Creyeron que habría allí cerca alguna población; pero no era así, porque aquellos adoratorios eran de mercaderes y cazadores, que pasando sacrificaban en ellos. Lo que hallaron fue mucha caza de venados y conejos, y habiendo sondeado la laguna, y llevando buena razón de ella, se embarcaron."




El padre López de Cogolludo refiere también la segunda visita de los españoles a la isla. La hizo Cortés tras su salida de Cozumel, en marzo de 1519. También piloteaba Alaminos:

"Llegaron a la laguna de Términos, donde se dice hallaron otro navío. Había enviado por delante un navío pequeño y buen velero, que reconociese el puerto, y si era tierra a propósito para poblar y había mucha caza como se decía, y pusiese señal de cómo había llegado. No le hallaron en este puerto; carta sí en que decía, cómo era buena tierra y de mucha caza, y que había halado una lebrela que en el viejo pasado se quedó en tierra, la cual luego que vio el navío, hacía muchos halagos y señas, y estaba muy gorda."




Por cierto, la Ordenanza de Montes, publicada en México en septiembre de 1795, y aprobada por real orden de febrero del siguiente año, el gobierno estableció en la isla un presidio, dándole de extensión 30 leguas. Y presidio fue más de un siglo. Al hacerse la Independencia, el presidio que era gobernado directamente por el virreinato en lo civil y militar, se agregó a la Capitanía General de Yucatán, de cuyo obispado e intendencia dependió en lo eclesiástico y financiero, formándose un Partido de la entonces llamada provincia, y que más habría de erigirse en Estado de Yucatán.

Justo Sierra O'Reiley consigna en su Partido del Carmen que así continuó, sin alteración, hasta que se transformó en Territorio por decreto de 16 de octubre de 1853. Promulgada la Constitución del 57, proclamada en Campeche la separación del resto de Yucatán, siguió su suerte el Carmen hasta la definitiva erección del Estado, "del cual forma hoy el Carmen el partido más rico, interesante y productivo."



ISLA VELERA HACIA LA LIBERTAD

Por eso fue que tu entrañable amigo, Toñico, Salvador Antonio Vadillo Oconue,--cuyo hijo habría de vivir varios años en casa de mi abuelita Elena, aquí en México, donde llegó a estudiar Ingeniería--, le puso vela y motor a la Isla para escapar de la prisión de la injusticia:

Voy a ponerle velas a mi Isla,

diez, veinte cien,

quien sabe cuántas

y por las dudas

un motor de borda

que sirva de emergencia.

y levaremos anclas

después de consultar a las estrellas,

dejaremos el lodo

que nos une con la carpeta sólida,

en busca de otros cielos

con amplitud de espacios,

donde la vida sea

lo que debiera ser:


LIBERTAD DE PALABRA,

LIBERTAD DE PENSAR,

ARROJAR POR LA BORDA

BASTARDAS AMBICIONES..

¡Voy a ponerle velas a mi Isla!

¡Qué bonito es soñar!




Toñico continuó las tareas literarias que había comenzado contigo. Fue fundador y director de Brecha, revista literaria que duró años y que nos enviaba desde el Carmen, para nuestro ocasional solaz y goce.

Fue un poeta de ideas socialistas. En El Pan, Radamés Novelo Zavala, su compilador, lo tiene diciendo al principio del poema (3.-):

"Los pequeñuelos lloran y piden a la madre/ un pedazo de pan./ Pobrecillos, ignoran que el padre, el obrero, en su afán,/ ya recorrió talleres en busca de trabajo./ Y regresa abatido sin el pan, cabizbajo..."



EL DUELO CON "PANCHO VENADO"


Fue Toñico quien te animaba a batirte con Pancho Venado, en el Campamento del "Kilómetro 47" (4.-) que narro al principio de la segunda parte de esta obra.

-- Sí, Jorge: Aquí estamos en un campamento de meros machos y no hay forma de que te eches pa'tras...Espero que por puritita suerte le pegues tú en una pierna, un brazo..¡y te salves!..Pero, ¡p's si no, ni modos!

--Pues sí, pero fíjate cómo mata venados: con un solo tiro de pistola. ¡Es tan chingón que no sabe de las escopetas! Y tú has visto ¡cómo, se echa las palomas al vuelo!...¡Está cabrón! Pero, tienes razón.. Ya no hay remedio...

--Pues, Jorgito, ponte a practicar unos tiros: que llegues al duelo un poco entrenado...

--No,¡qué voy a practicar ni qué carajos!...Si ni tiros suficientes tengo...¡Mejor me pongo a escribir cartas a mi madrecita, a mi esposa, a mi futuro hijo, a mis amigos...¡Voy a despedirme, Toñico!

¡Y don Jorge, se pasó ese día hasta la madrugada escribe que te escribe cartas y cartas a todos los que quería, que eran muchos...!(6.-)




Y fue Toñico quien llegó muchos años después al Liceo Carmelita, también. No a estudiar. Dirigió el taller mecánico y fabricó un motorcito --el primero armado en el Carmen-- que pudo haberle inspirado la idea de ponerle motor de borda a la Isla para escapar de la prisión de la palabra en búsqueda de libertad de pensamiento y de expresión.

Porque, papá, el Carmen fue Presidio colonial; fue presidio para los anarquistas y socialistas en cada uno de sus kilómetros cuadrados, en los años Treinta; siguió siéndolo en los 50's y Radamés pone en "A MANERA DE PROLOGO", en 1985, en el poemario de Toñico--publicado por el Grupo Brecha--la queja en versos del asfixiante ambiente del que anhela escapar Toñico surcando olas, vertiginosamente, bergantín con proa hacia la emancipación; verga, sostén de blancas velas, en búsqueda de la verdad: el bonito sueño de un poeta reprimido que pone hasta mil velas a mi Isla, para dejar atrás el cieno de la intolerancia.(7.-)

Y si de modo tan lacónico la protesta del poeta en pos de la potestad, nos ayuda a concebir parte de la realidad carmelita, para describir el paisaje, ¿qué mejor que rendir tributo al camarada Toñico pidiéndole prestada su cálida, cadenciosa y vibrante voz, de hombre enamorado del terruño y de la mar de infinita "variedad de verdes y de azules que el Astro Rey sobre sus aguas pinta y parece que anhelo insatisfecho le lleva a practicar en cada sitio, buscando un nuevo verde que haga juego con el azul del infinito", inclusive el verdinegro donde termina la Isla, para acuarelear al Carmen a la Claussell, retratando autóctona y poéticamente la Isla?





DE LOS PERIÓDICOS "IRIS"


Puede ser que todo lo anterior haya influido para que el periódico que diseccionaremos reciba el título "Iris". Pero, resulta insólito que descubramos una razón histórica insospechada por el joven director de aquel entonces. Sí, es inverosímil que ignore el editor de 17 años de edad que ¡¡109 años!! antes existió "El Iris", el primer periódico mexicano ilustrado con litografías. Fue, asimismo, el primero en publicar caricaturas políticas.

Tres personajes ilustres lo editaban: el cubano José María Heredia, luchador por la independencia de su patria y dos carbonarios italianos Claudio Linati y Florencio Galli. Con lo anterior basta para denotar el tipo de publicación que surgió en medio de los estertores de la incipiente república, apenas liberada del temprano imperio.

En el primer número se tiene el siguiente ideario, bajo el rubro Introducción:

"Al empezar la publicación del "Iris", creemos de nuestra obligación dedicar algunos renglones a manifestar al público nuestro plan y fijar los deberes que no imponemos.

"El único objeto de este periódico es ofrecer a las personas de buen gusto en general y en particular al bello secso (sic), una distracción agradable para aquellos momentos en que el espíritu se siente desfallecido bajo el peso de atenciones graves, o abrumado con el tedio que es consiguiente a una aplicación intensa, o a la falta absoluta de ocupación. Lejos de nosotros la idea orgullosa de levantar en el Iris un monumento de gloria literaria a la nación o a nosotros mismos. Sabemos comprender muy bien la esfera limitada de nuestros talentos, y confiamos en que la benignidad del público dispensará nuestras faltas y favorecerá nuestros esfuerzos".

"Tenemos la intención de acompañar con algunos números del Iris retratos fieles de los personages (sic) contemporáneos que se han hecho célebres por sus talentos o virtudes."

Así es que este órgano se propuso difundir la literatura. tanto mexicana como extranjera, reseñar las actividades teatrales, reproducir " piezas de música moderna y dar cupo a todo lo útil o agradable, tal como la moda". Se especificó que se publicaría cualquier envío excepto el que tratara sobre política de manera directa o "no contengan personalidades". Pero, lo cierto es que se trato de política interna y extranjera tales como unas interesantes sobre una "expedición a Cuba por el General Santa Anna".

El poeta Heredia se separó a fines de julio siguiente y la publicación que salía los sábados comenzó una efímera vida bisemanal, apareciendo miércoles y sábados, desde el número 14, con la noticia de que "este papel está destinado a las ciencias, a las artes, a la literatura y a la política" e incluía--entre sus "principales asuntos"--"noticias extrangeras".. El autor de las extraordinarias litografías es Linati. Sin embargo, se atribuye un retrato famoso de Miguel Hidalgo al primer litógrafo mexicano, José Gracida, de origen oaxaqueño.

El último número es el 40, aparecido en agosto dos y allí Linati y Galli se despiden para irse a carbonear en secretísima forma a otras latitudes, pues en su "aviso" sepulcral expresan su "agradecimiento a la hospitalidad mexicana".

De manera trágica ponen que "arrastrado cada uno por su estrella, pueden que dejen el hermoso Anahuac por otros climas o truequen tal vez la pluma por el arado."

Más claro ni el último epitafio, en la página última, citando a Demóstenes: "No hay nada más duro para los hombres honrados que el no poder manifestar su opinión con toda libertad."

Así, tu "Iris" fue precedido por ese ocaso del "Iris" de 1826, en la capital de la emergente república. Su nacimiento, como desaparición, debido a semejantes causas. Tú también trocaste la pluma por los libros. Medio siglo, después, Rivera Cambas, tu bienamado prócer, en términos parecidos se despidió en el último número de "El Combate”, que había nacido en 1876, precisamente: (8. -)

"EL COMBATE" de RIVERA CAMBAS

"Después de haber batallado cinco años, es preciso que descansemos y que llevemos a la sala de armas la pluma que nos ha servido para trabajar por la regeneración de nuestra Patria.-- Por hoy tomamos cuarteles de invierno y sentamos plaza entre los inválidos.-- Nuestra pluma se va a enmohecer; pero ¿qué mal menor le puede acontecer, cuando han muerto las instituciones democráticas y son unas mentiras las leyes y la moralidad?--Cuando el falso apóstol del pueblo, el hipócrita constitucionalista desaparece de la oscura política, nosotros ya no tenemos que seguir siendo el remordimiento de nadie.--Damos las gracias a los amigos que nos han acompañado durante los años de nuestros trabajos.--Si alguna vez aparece un periódico con el mismo nombre que el nuestro, no lo confundan tomándolo por el Combate que apareció en 1876. --Cuando queramos resucitar, sabremos usar la contraseña misteriosa que une a los independientes, a los que jamás doblamos la rodilla ante los tiranos.--Para la resurrección esperamos el consejo del porvenir y la marcha de los sucesos...

El Combate murió así, para nunca jamás resucitar (pues el General Díaz llegó para quedarse más de tres décadas).. "Inició sus actividades atacando al gobierno de Lerdo y en posición tan hostil y decidida que podría tachársele de francamente subversiva", dices con franqueza. En tu Bibliografía de Rivera Cambas ( 9. -) citas el artículo titulado, precisamente, El Combate, publicado el primer día de su aparición: (11. -)

"El Combate.--Periódico político.--Prospecto.--"Al decir nuestras últimas palabras en el SUFRAGIO LIBRE, prometimos una publicación intérprete de la voluntad nacional, boletín de guerra comunicando oportunamente las noticias del triunfo de la Revolución que en toda la República se ha presentado.--EL COMBATE es el título del periódico, eco de los sucesos que tienden a regenerar al país devolviendo el uso de sus derechos que tienden a regenerar al país devolviendo el uso de sus derechos a nuestros conciudadanos... EL COMBATE VERÁ LA LUZ EN MÉXICO MIENTRAS HAYA LIBERTAD PARA ESCRIBIR; cuando las circunstancias obliguen al Sr. Lerdo a matar a nuestro periódico..."

En tres patadas plasma Cossío la actitud de Rivera Cambas: "Testigo de las múltiples discordias de partidos y facciones que la arruinaban, quiso tomar parte en la vida pùblica y se declaró por las ideas de la libertad y del progreso. Así combatió a Lerdo por el porfirismo; pero cuando, triunfante éste, no cumpliera las promesas de su bandera, se levantó contra la farsa, contra la opresión, y lucha con un denuedo, con un ardor y con una decisión que asombran."

Tiene razón el sabio González de Cossío: Desengañado de la polìtica, Rivera Cambas se refugió en sus libros como si en ellos quisiera hallar lo que deseaba para su patria.




DEL PERIODISMO A LA LITERATURA POR LA VÍA DE LA DECEPCIÓN





DEL ORIGEN AL FIN


Y así como los fines y términos de todas las cosas se acuerdan en alguna forma y medida con sus principios y orígenes, esa múltiple concordancia que guía adelante el crecimiento desde el nacer cumpliendo por una metamorfosis regresiva esa disminución y ablación hacia el final que place a la naturaleza, así acontece con nuestro ser solar y lunático carmelita. Canto a Ciudad del Carmen aunque se pretenda que me canto a mí mismo, como un Walt Whitman vernáculo. Simplemente, hablo de mí y de los míos porque somos suyos, formamos parte de ese inmenso panorama que me tocó vivir y que comienza en esa isla de Tris, --tan triste--, en ese periódico Iris y en ese periodo literario del Tríptico Erótico, heroico e irónico.

¡Oh!, ese horroroso torrente profundo. ¡Aaaah! y el amor al mar, ve la velada lunar: mar-mar carmesí del Carmen; ven-ven, van-van, y vienen en olas, no solas, en colas, como las lenguas luengas del fuego y las gloriosas puestas de sol y plenilunios resplandecientes e iridiscentes arco iris y rosales del jardín de la plaza grande con el kiosco barrocamente enverjado y el sobrio templo de la Virgen y las diminutas callejuelas y las casas blancas y las tejas rojas y el Golfo y El Ultimo Paseo y Paseo de Mentiras y la guitarra de Guty y cómo le besó bajo el morisco balcón y se puso colorada y mi madre pensó en mí que latía en su seno y rodeó con sus brazos al revolucionario anarquista y lo atrajo hacia sí mientras le susurraba que dejara en paz al cura y al "vampiro del civismo" y al "pica-pica torerillo y banderillero" para que con todo su perfume y la voz de su corazón que latía loco-loco y sí dijo que tendría piedad porque detendría su espíritu en presencia de todas las graves consecuencias y lo constante de los sufrimientos de su adolescente esposa y que se unía con el ser que había engendrado para heredarle plenitud, armonía, esplendor y Paz, PAZ!!! Deseaba acabar con el caos, la disonancia, el grito y la rebeldía: evitar el exilio.


LA PATRIA Y LAS PALABRAS PERDIDAS:


Pero así no fue: no hubo proper words in proper places. Y, entonces, el embrión Lívingston comenzó a ser: lírico hurgador en las profundidades marinas del seno materno de frases encantadas para el sentimiento de la patria perdida. Lo triste fue que palabras como el Carmen no podrían ser pronunciadas, luego, sin una gran nostalgia por el lamentable distanciamiento de la porción de tierra rodeada de la Laguna de Términos, donde terminó la existencia para la familia Denegre-Vaught Alcocer.

Habíamos, todos juntos, los tres, identificado el lenguaje con la experiencia. No se podía confiar ya en la palabra escrita, decretadora del destierro. Frases como: "No habrá progreso hasta que caiga la última piedra del último campanario de la última iglesia", irritaron enormemente a nuestros coterráneos, ¿no? Por eso, el cura lanzó gritos de alarma: ¡¡Socorro, Por la Virgen del Carmen y nuestra Madre María, Auxilioooo, estos pelafustanes ¡¡quieren quemar el templo!!", cuando sólo ensayaban la serenata de las novias, soñando en noches de luna: ¡¡¡Y fueron a dormir al calabozo de la presidencia municipal, frente a la iglesia, mientras socarrona y beatíficamente sonreía Monseñor!!!

Behold!: Aquí pruebo el pensar carmelita: ¡ingenio heurístico! Dónde nada quedó que defender decidiste elevar lo periodístico! Diversión cruel, absurda y peligrosa que heredé. Búsqueda de la mote juste, con rabelianos y rebeldes epítetos:

"No serviré por más tiempo a aquello en lo que no creo, llámese mi hogar, mi patria y mi religión. Y trataré de expresarme en algún modo de vida o arte, tan libremente como se pueda, tan plenamente como pueda, usando para mi defensa lasa solas armas que me permito usar: silencio, destierro y esfuerzo."

Lo pudo haber firmado James Joyce o Jorge Denegre-Vaught, pero de todo eso me acordé.

El autor evoca su propia obra periodística radiofónica tan temprana como la paterna, escrita, y llega a comprender ahora, 34 años después, por qué se oponía su padre a que a los quince años de edad incursionara en la práctica de la comunicación de masas que antaño causara a la familia tantas desgracias. En 1958 ni entiende ni está conforme en que le exija que se concentre en sus estudios de leyes, y se olvide del "ingrato" periodismo.

Ante tal actitud de rechazo paterno por la praxis de una profesión que le apasionaba, Lívingston decide motu proprio su destino y obtiene una beca del Canada Council, (14. -) deja la carrera de Derecho en la UNAM e ingresa a la Universidad de Carleton a estudiar Periodismo en la primera escuela creada en la posguerra para el estudio de las Ciencias de Comunicación, dirigida por el fundador de estos estudios en la UNESCO, Dr. Wilfrid Eggleston.

IRRUPCIÓN LITERARIA